Descripción
El Reino Unido -que en ese entonces consistía en Inglaterra, Escocia, Gales y toda Irlanda- fue uno de los “aliados” de la primera guerra mundial (1914 a 1918), peleando contra los poderes centrales (imperio germánico, el imperio austrohúngaro, el imperio otomano y el reino de Bulgaria).
Las fuerzas armadas del estado fueron reorganizadas -la guerra marcó el inicio de la fuerza aérea real, e incrementó en tamaño debido a la introducción de fuerza por primera vez en la historia de reino Unido así como el incremento de ejército de manera voluntaria, conocido como la armada de Kitchener, de más de 2 millones de hombres.