Descripción
Desde mediados del siglo XVI, las salvaderas eran de uso común, practicamente era una pieza que necesariamente era incluída en las escribanías, al igual que el tintero, la pluma y el cuchillo abrecartas.
Una salvadera es una especie de salero o recipinete con hoyos en cuyo interior se ponia sal, arena o polvo secante para poner sobre los escritos y evitar que se corriera la tinta.